No hay un solo día en que la magia existe en tu vida. Todo depende de la mente que crea tu realidad
Tu mente crea tu realidad y proyecta la posible posibilidad. Por ello, ésta ha de estar depurada, en calma, y comprendiendo que es un potente instrumento a nuestro servicio para obtener lo que creemos merecer. Si hay obstáculos, es por nuestras creencias, experiencias, miedos e inconsciente, u otras informaciones que requieren ser despejadas.
La mente, unida a la emoción, proyecta una realidad para ser vivida. La magia no es algo ajeno a nosotros o de pocas personas, sino que es una manifestación natural, cuando vibramos a una frecuencia de amor y fluimos en ella. Forma parte de los regalos de vivir desde esta dimensión, adquiriendo parte de lo que somos. Cuando vibras desde el amor todo se transforma. Todo se vuelve aparentemente mágico, porque hemos comprendido la fuerza del amor y, en presente, hemos manifestado esa posibilidad. Si estás en el miedo o atrapado en otras memorias, afectos, no puedes manifestar todo lo que deseas. Si no estás atrapado en los apegos, piensas y sientes en presente, la manifestación se pone a tu servicio. Desaparecen las barreras porque no hay miedos, y sabes merecer el amor y los regalos que la vida tiene para ti. Se hace un proceso imparable y una forma de vida. Comprendes que las casualidades no existen, que todo está puesto al servicio y a beneficio de tu evolución, la gratitud comienza a formar parte de tu existencia, y ella alimenta la fuerza del corazón. Nos abre a la experiencia del amor y la manifestación. Los obstáculos desaparecen y el gozo forma parte de la manifestación. Todo se vuelve eterno, y lo que necesitas o pides viene a ti como proceso de seguir evolucionando y vibrando en la experiencia del amor. Una mente entrabada necesita dejar atrás juicios, críticas, prejuicios. Salir del dolor-sufrimiento, vivir el ahora y conectar sus afectos a la mente unitaria, positiva, o neutra, o desprovista de dolor. Puede imaginarse logrando sus objetivos como una manifestación material que ya está sucediendo ahora. El universo entiende ahora y lo materializa. Muchas peticiones y necesidades pueden no llegar. Se requiere un fervoroso convencimiento interior, fe, determinación y una mente-corazón entrenada.
Hay personas que por momentos pueden manifestar atraer situaciones positivas cuando van vibrando en esa frecuencia, y otras alejarse. Ello es normal, porque tenemos que seguir trabajando nuestros apegos y memorias. No siempre estamos 100% en amor. Ello seria un estado de total iluminación y humanamente es difícil. Hay muchas impurezas y experiencias que han marcado nuestra existencia. Si es posible transcender el sufrimiento, que no implica que venga dolor, pero éste se acepta y es liberado, en función de las experiencias que van apareciendo. Ello posibilita vivir en la magia y en lo que algunos llaman 5D. Saber que hay personas que pueden vibrar más allá de 5D, según los planos en los que puedan conectarse, su procedencia, la misión para la que vengan y su evolución del alma. Como todo, tiene grados de aprendizaje y acceso a la sabiduría, según el trabajo realizado, y su misión. No obstante, todo humano puede elevar su frecuencia, si trabaja su sufrimiento y busca su liberación. Ello abre las puertas a la transcendencia y aquello que todo ser humano puede tener, que es magia en su vida. No basta con pensarlo y sentirlo, se requiere un trabajo y vibrar realmente en amor. Implica muchas veces ir transformando nuestro dolor-sufrimiento en amor.
Permitir el proceso de expansión y liberación interna, equilibrando nuestros vehículos, arreglando nuestros circuitos, y activando nuestra conexión con el cosmos. Ello nos prepara para poder ser magos, no depender de otros y compartir con ellos nuestros tesoros. La posibilidad depende de uno y del trabajo realizado. El ego o heridas muchas veces están debajo de esa no manifestación de la magia. Por ello, tomar consciencia, e ir trabajando nuestra sombra, es el único camino para acceder a esos regalos que la vida tiene para nosotros.
Parte II. Preguntas
Muchas veces creemos que todo está bien, que estamos en Amor, te esfuerzas y nada pasa: ¿Qué hacer con ello?
La realidad te explica que no todo está bien, pues es un hecho manifestado. Si estuviera bien, obtendrías directamente los regalos o situaciones necesarias para evolucionar, sentirías gozo y tendrías menos apegos.
El alma sería tu guía y tu mente-corazón el día a día. Si hoy no estás, es simplemente porque no vibras aún en amor y te falta trabajo. La vida se hace en cada instante. Puedes observar si vives o no en presente. Por ejemplo, si tienes preocupaciones constantes, no duermes bien, discutes o te cuesta reconciliar un enfado, es evidente que te falta camino por recorrer. Es algo natural superar los obstáculos para nuestro aprendizaje. Ello no implica que, en algunos momentos, tengas la frecuencia adecuada y se te presentan los momentos con su belleza y esplendor. Lo ideal es que esos momentos sean cada vez más frecuentes, aprendas a observar tus necesidades y las vayas cubriendo desde el amor, la paciencia y el aprendizaje.
Depositando en ti la responsabilidad, y aceptando que todo lo que cada uno tiene y necesita… su tiempo. Es un proceso que no puede ser forzado o impuesto porque es mental y sí, vivido, y fluir en la experiencia, en lugar de forzarla o meditarla. Ello puede obstruir enormemente el crecimiento. Vivir es sentir, experimentar y discernir. Ello es distinto de pensar y dar vueltas a lo vivido. Una vez que sientes y comprendes sueltas. Si das vueltas, revives y aumentas el problema. Con los cambios y aprendizajes cotidianos, nos podemos ir permitiendo aprender los mecanismos que nos van permitiendo vivir en amor dentro de nosotros mismos. Sin nuestro amor interior y anhelo no hay manifestación interior ni regalos. Por ello, primero somos nosotros y después acontecen las circunstancias y personas para seguir evolucionando.
¿Qué pasa con el karma?
¿Manifestamos la Magia igual?
El Karma te impedirá manifestar algún tipo de situaciones, y no otras. Si lo que deseas obtener forma parte de pasar un proceso, primero tendrás que pasarlo, para que después los regalos vengan a ti. Entra dentro de las memorias, aprendizajes y obstáculos a superar. Si la magia no está, primero requiere hacer un trabajo y comprender dónde está atascado el proceso; aceptarlo, y dejar que cuando tenga que ser fluya, y la magia venga a ti. Siempre es por algo, pero no porque no lo merezcamos, sino por nuestros procesos individuales del alma.
